Ir al contenido principal

El Monstruo de los Globos: Pasado, Presente y Futuro


En la vida de los pueblos hay situaciones límite. Momentos en los que la paciencia popular y su capacidad de soportar adversidades, aparentemente infinitas, se agotan. Esto sucede cuando el poder establecido extrema abiertamente su crueldad y cierra todas las válvulas de esperanza de una vida mejor para las mayorías. Así sucedió en repetidas oportunidades, aconteció en Bolivia en el transcurso de la Guerra del Agua (2000) o en Argentina con el "que se vayan todos" en el 2001. Ambos acontecimientos abonarían el surco en el cual se constituirían luego gobiernos transformadores, es la fase anterior a un cambio (independientemente de que sea bueno o malo). También el Caracazo de 1989 marcó el momento de un levantamiento popular que culminaría con la elección de Hugo Chávez poco menos de diez años después, poniendo fin a cuatro décadas de componenda elitista en Venezuela. Del mismo modo, el triunfo de la Revolución Ciudadana liderada por Rafael Correa en Ecuador (2006), había sido precedido por un brutal vaciamiento bancario en 1999, al que siguieron dos alzamientos populares en el año 2000 y la Rebelión de los Forajidos en 2005, que terminó con el gobierno de Lucio Gutiérrez. Los ejemplos podrían multiplicarse llegando incluso al Bogotazo de 1948, una enorme reacción popular ante el asesinato del candidato presidencial liberal Eliécer Gaitán que dio pié, poco tiempo después, al surgimiento de la lucha guerrillera en Colombia. La misma asfixia política fue el germen de la expansión posterior del fenómeno en distintos puntos de la región que tuvo en las revoluciones en Cuba y Nicaragua su momento triunfal, pero como desgarradora contracara, la criminal acción represiva de regímenes dictatoriales, costando la vida de miles de jóvenes y activistas sociales.
“Las preguntas verdaderamente serias son aquellas que pueden ser formuladas hasta por un niño. Sólo las preguntas más ingenuas son verdaderamente serias. Son preguntas que no tienen respuesta.”
Milan Kundera

Una de las ideas políticas centrales del liberalismo ha sido, en sus inicios, la del contrato social. Según ésta, los individuos debemos abandonar una suerte de "libertad absoluta" para ceñirnos a una sociedad con obligaciones y derechos, conocida como "Estado". Estado que, según los nuevos liberales, debe ser cada vez más pequeño, las obligaciones más estrictas y los derechos más relativos.
La reconfiguración capitalista que viene formateando sujetos a mayor velocidad y efectividad que en el pasado. Pero también están abriendo la puerta a sus propias encerronas.
 
Desde los inicios del gobierno de Macri, se alegorizó el carácter retrógrado de sus políticas mediante fechas significativas de la historia argentina. Los 90’, década en la que el neoliberalismo impactó de lleno privatizando la vida bajo el envoltorio de la eficiencia, pareció en un primer análisis situar claramente el retroceso.

La descalificación a opositores, el linchamiento mediático continuado, el intento de quebrar las organizaciones populares y la posterior persecución judicial y encarcelamiento sin juicio a varias de las principales figuras del gobierno anterior, sugirieron, como el período que mejor cuadraba al gobierno macrista, la imagen del año 55’, en el que un gobierno militar derrocó a Perón, prohibiendo y proscribiendo posteriormente al peronismo y a la democracia. También se aludió al año 30’, comienzo de la “década infame”, en la que una restauración conservadora impulsada por la oligarquía terrateniente sofocó las libertades civiles y las demandas sociales.
El carácter colaboracionista y negacionista de varios integrantes del gobierno en relación a la última dictadura militar, el intento de acortar a la mitad las penas de convictos por delitos de lesa humanidad, el desmontaje de reparticiones estatales dedicadas a la protección de derechos humanos, el otorgamiento de prisión domiciliaria a genocidas, la desembozada represión ante la creciente protesta social y las amenazas a líderes sindicales configuran un paisaje que conecta directamente con la tragedia que vivió el país entre los años 1976 y 1983.


Votar al propio verdugo
La idea aparece de modo recurrente: en la calle, en los bares, en las universidades, en innumerables textos que se preguntan acerca de por qué, en apariencia, hay un sector de la sociedad que en las últimas dos elecciones (presidenciales, primero; legislativas, después) ha decidido ir en contra de sus presuntos intereses. ¿Por qué la Alianza Cambiemos logra un porcentaje de aceptación tan alto entre aquellos que resultan ser los principales perjudicados de sus políticas? Todo fenómeno social emerge, sin dudas, a partir de una multiplicidad de factores que lo ponen en marcha. Aquí interesa centrarse en uno de los resortes que llevó a un sector de la población a votar a Cambiemos: el resorte ideológico, ese que ha trabajado sobre el alma de los miembros de nuestra sociedad haciendo honor a lo que en los años ochenta enunció la Dama de Hierro: “la economía es el método, el objetivo es cambiar el corazón y el alma".

Objetivo que se ha logrado, en parte, gracias a la imposición de un sentido común, verdadero sexto sentido socialmente compartido, donde prima un individualismo a ultranza que se puede resumir en una frase, que es el título de un artículo de Guillermo O'Donnell: Y a mí qué mierda me importa. Qué mierda me importa que suba la nafta, si yo tomo colectivo; o qué mierda me importan los pobres o los desocupados, si yo como y tengo trabajo. En definitiva, qué mierda me importa el otro. Las operaciones que el gobierno de Cambiemos realiza no son operativos de distracción, sino alimentos ideológicos para los hijos y nietos que fueron formateados por la dictadura cívico-militar de Videla & Cía., y que ahora gozan con el autoritarismo y el fuera de toda ley, excepto la que impone Cambiemos. Esos que aplauden la represión y la prisión preventiva a cualquiera y de cualquier manera son los mismos que aplaudieron los piquetes del campo y ahora aplauden cuando meten preso a un sindicalista, pero no lo relacionan con Gerardo Martínez, el capo de los delincuentes disfrazado de gremialista elegido y protegido por Macri. Muchos de quienes apoyan hoy a este engendro democrático no lo hacen por estar hipnotizados, ni por el placer de la autoflagelación, sino porque son producto del Proceso de Reorganización Social (Daniel Feierstein) que comenzó en 1976 y que tuvo su realización simbólica durante los años ochenta y noventa. Este proceso tan sólo tuvo una interrupción de 12 años, y quienes fueron tocados en su alma (psique) –desde el sentido común–, no lo pudieron soportar.

He aquí la batalla que los defensores de los genocidas, hoy en el poder, vienen librando desde hace por lo menos 30 años. La batalla por conquistar el sentido común –ese cúmulo de valores, de representaciones, de creencias, respecto de las cuales, como sociedad, no habría discusión alguna porque son, en efecto, de sentido común; evidencias, verdades objetivas, las cosas como son. La conquista del sentido común es el objetivo madre de toda ideología que, al triunfar, se mimetiza con él. Reflexionando sobre la sociedad actual, Nicolás Casullo decía en Las cuestiones que “la sociedad que queda es pensada por una derecha en estado de generalización, normalizada como sentido común”. Y es que el neoliberalismo, además de ser un sistema político-económico, también es un proceso de reestructuración cultural. La “normalidad” aparece como un valor indispensable al que toda sociedad debe aspirar: ser un país “normal”, en orden, con reglas claras. Detrás de esa “normalidad” no habría nada, puesto que hablamos, desde el sentido común, de las cosas como son. Es en esos términos que nos habla la cultura neoliberal. Y es así, entonces, que quienes votan a Cambiemos a pesar de ser sus principales víctimas, no lo hacen contra sus intereses (económicos); lo hacen para restaurar las ideas que se sostuvieron durante años y que durante el kirchnerismo, aunque sea en parte, se intentaron subvertir, ideas tales como que "no hay que exigirle al Estado que garantice el trabajo", "cada uno debe procurárselo" y "si no puede, por algo será". El emprendedurismo que hoy pregonan los Esteban Bullrich y afines es un rostro más del individualismo hegemónico que aún nos domina. Este fue el gran cambio subjetivo que el neoliberalismo logró desde los años de plomo. La lógica de los campos de concentración tuvo como víctimas también a todos aquellos que estaban fuera del campo. Los medios a través de los cuales se logró este cambio subjetivo fueron, sin duda, los medios de comunicación que hicieron todo lo posible por ganar la batalla de las conciencias o, como ya hemos dicho, la batalla por el sentido común. Ahí es, entonces, donde debemos dar la pelea. Y también en la calle.

Pero las sociedades son complejas y el sentido, en la disputa, si bien puede acotarse, nunca se cierra del todo. Es así como no sólo existe un sector social que fue "formateado" por este dispositivo; también hay otro que se ubica en una posición antagónica. Los que resisten, los que se indignan, los que se amargan, los que militan para oponerse al oprobio que significa este asalto al Estado que no merece el nombre de gobierno. Poner de relieve el carácter conflictivo que constituye lo social hace que la “normalidad” neoliberal no aparezca más que como una verdad social e históricamente construida, y entonces puede derribarse. Para ello, sigue siendo fundamental la política como posibilidad de construir nuevos sentidos. A la pregunta de por qué hay un subconjunto de la sociedad que no comparte el sentido común del otro subconjunto, no aparece una respuesta fácil ni unívoca. Pero podríamos decir: hay un real en juego que retorna y moviliza a este sector. Ese real ha sido nominado como Los Desaparecidos. Real porque no cesa de no escribirse. Real que, cuando desde el poder político y judicial quieren borrarlo, se les pone en cruz impidiendo que la cosa funcione como quisiera el Amo. Recordemos la marcha contra el 2x1, las marchas por Santiago Maldonado, las marchas de las Madres, los nietos restituidos por las Abuelas, el reciente siluetazo contra Etchecolatz, entre muchos otros casos. La batalla es cultural y por eso mismo es política. Y como la única batalla que se pierde es la que se abandona tenemos que continuar, por los 30.000, por Santiago, por Nahuel, por todos y por nosotros.
Lic. Claudio Boyé. Psicoanalista
Pablo Boyé. Estudiante Ciencias de la Comunicación


"1984" es el libro donde el escritor británico George Orwell inscribió en el imaginario mundial como símbolo del control total de la población mediante la vigilancia, la represión y la manipulación de la realidad, describiendo con gran aproximación al gobierno del Sr. Tijeras Macri en referencia a su política de comunicaciones.
Ya el primer día de su gestión emitió un decreto subordinando la comunicación al poder ejecutivo y se eliminó de un plumazo la ley de medios. Poco tiempo después dejó sin efecto la adecuación del pulpo mediático Clarín, que tenía como fin equilibrar su posición dominante. A través de la pauta publicitaria se premió a socios y se castigó a medios críticos, exigiendo la renuncia de periodistas por sus opiniones. Se eliminó la transmisión gratuita del fútbol, devolviendo el negocio a los grandes operadores privados. Cientos de comunicadores fueron despedidos del aparato estatal, discriminando según preferencias políticas, luego de revisar sus perfiles en redes sociales. Los montos destinados  al fomento de la comunicación comunitaria fueron retenidos o recortados y varias emisoras decomisadas.
Luego de dos años, el gobierno cierra la muralla de la opinión única: se aprueba la creación de un holding que agrupa a la principal empresa de TV por cable, los operadores mayoritarios de internet y poderosas compañías de telefonía fija y celular, con posición hegemónica en todas las áreas. Al mismo tiempo, se da fin al sistema público de Televisión Digital Abierta (TDA), que de forma gratuita y federal, permitía acceder a toda la población a contenidos de calidad.
Como lo señala un reciente comunicado de la Coalición por una Comunicación Democrática, "el Gobierno consagra posiciones cuasi-monopólicas mientras precariza el esquema regulatorio legal argentino con decretos o resoluciones que violentan leyes para satisfacer los negocios de un puñado de grandes empresas locales y transnacionales del mercado del entretenimiento, la información y la conectividad".
La práctica macrista de asfixia de voces críticas (por algo le decimos Sr. Tijeras), concesiones monopólicas, vaciamiento de la comunicación pública, extorsión a medios no afines, despido, persecución y represión a periodistas, a la hora de reclamar – declamar – la defensa de las libertades de expresión y prensa, descalifican y deslegitiman tan sólo una voz: la del propio gobierno.



Derecha o Democracia

La explosión social aparece cuando el pueblo ve amenazada su subsistencia, coartada su libertad, mancillada su dignidad y toma clara conciencia de la impunidad y la soberbia de los sectores dominantes. Ocurre cuando al habitual saqueo y vejación a los estratos sometidos se suman la manipulación, la represión, el fraude y la persecución o proscripción de toda organización o líder, cuyas políticas pudieran ofrecer una alternativa emancipadora a la desigualdad sistémica. En tales momentos, la impotencia se convierte en potencia de rebeldía y cambio.
"…será preciso empoderar a las personas excluidas, de tal forma que, si las políticas y los actores pertinentes no cumplen sus cometidos, dichas personas puedan alzar la voz, reclamar sus derechos y recurrir a mecanismos de reparación."
Informe del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo

La derecha que domina al mundo no es, no fue, ni será nunca democrática.
La amenaza, la difamación, la extorsión, el asesinato, la compra de voluntades, el bastardeo mercadotécnico de la política, la mentira, la represión, la conspiración, el chantaje, los pactos espúreos, el nepotismo, las dictaduras, la manipulación informativa, los golpes, la judicialización y encarcelamiento de líderes, el fraude, el tráfico de influencias, la cooptación empresarial, el espionaje, el robo de datos son tan sólo algunas de las tácticas de un amplio repertorio cuya única finalidad es aniquilar las legítimas aspiraciones populares de obtener iguales oportunidades de bienestar y desarrollo humano. Y no solamente en la Argentina del Sr. Tijeras, esto es un fenómeno mundial.
Hasta el más bruto sabe que hay mucho de podrido en la sociedad y no necesita de eminencias que iluminen el desastre de por si vivencia, y menos se necesita un oráculo para vislumbrar un futuro al menos incierto. Pero al antihumanismo hay que contraponerle un humanismo donde el ser humano, el pueblo, el ciudadano concreto, sea el valor principal y lo más importante, escala de valores desde donde se tienen que acomodar la economía, la política, la cultura y el todo social. Hay que concebir mejores versiones de la ideología reconocidamente humanista para que enamore de un flechazo a grandes capas de la población.
Aún a pesar de las censuras del Sr. Tijeras.
La pregunta del millón será ¿qué opositor está dispuesto a hacerlo?... hasta ahora, no parece haber mucho postulante. Espero que aparezcan antes de que el pueblo los empiece a reclamar en las calles.

Los datos objetivos son – al menos en esta versión postmoderna de la historia – prácticamente unánimes: la derecha se ha consolidado nuevamente en el poder político y USA todos los recursos a su alcance para atornillarse allí. Sin embargo, hay un dato de la realidad que desmonta toda esa escenografía de cartón pintado. Sobre ésta, se abatirá un enorme huracán de desesperación, fruto de la miseria y la exclusión social.

Que esta indignación justificada no sea simplemente una catarsis violenta y logre convertirse en un proyecto solidario y colectivo, que, lejos de instalar nuevamente dependencias permanentes, sirva para instaurar un nuevo tipo de relación social colaborativo, horizontal y equitativo, no dependerá exclusivamente del avatar electoral, sino de la formación, la información y la organización de la base popular. Esa es la raíz de una democracia verdadera, la que se construye desde el pueblo mismo.



Comentarios

Lo más visto de la semana pasada

Los 100 Mejores Álbumes del Rock Argentino según Rolling Stone

Quizás hay que aclararlo de entrada: la siguiente lista no está armada por nosotros, y la idea de presentarla aquí no es porque se propone como una demostración objetiva de cuales obras tenemos o no que tener en cuenta, ya que en ella faltan (y desde mi perspectiva, también sobran) muchas obras indispensables del rock argento, aunque quizás no tan masificadas. Pero sí tenemos algunos discos indispensables del rock argentino que nadie interesado en la materia debería dejar de tener en cuenta. Y ojo que en el blog cabezón no tratamos de crear un ranking de los "mejores" ni los más "exitosos" ya que nos importa un carajo el éxito y lo "mejor" es solamente subjetivo, pero sobretodo nos espanta el concepto de tratar de imponer una opinión, un solo punto de vista y un sola manera de ver las cosas. Todo comenzó allá por mediados de los años 60, cuando Litto Nebbia y Tanguito escribieron la primera canción, Moris grabó el primer disco, Almendra fue el primer

Mauricio Ibáñez - Shades of Light & Darkness (2016)

Vamos con otro disco del guitarrista chileno Mauricio Ibáñez, que ya habíamos presentado en el blog cabeza, mayormente instrumental, atmosférico, plagado de climas y de buen gusto, "Shades of Light & Darkness" es un álbum que muestra diferentes géneros musicales y estados de ánimo. Se relaciona con diferentes aspectos de la vida humana, como la sensación de asombro, crecer, lidiar con una relación problemática, el éxito y el fracaso, luchar por nuestros propios sueños y más. Cada una de las canciones habita un mundo sonoro único, algunas canciones tienen un tono más claro y otras más oscuras, de ahí el título, con temas muy agradables, melancólicos, soñadoros, algunos más oscuros y tensos, donde priman las melodías cristalinas y los aires ensoñadores. Un lindo trabajo que les entrego en el día del trabajador, regalito del blog cabezón!. Artista: Mauricio Ibáñez Álbum: Shades of Light & Darkness Año: 2016 Género: Progresivo atmosférico Duración: 62:34 Refe

Soft Machine - Facelift (France & Holland) (2022)

Cerrando otra semana a pura música en el blog cabeza, volvemos a traer un registro histórico de Soft Machine en vivo, o mejor dicho, dos registros pero este disco dobre muestra a los muchachos en el 2 de marzo de 1970 en el Théâtre de la Musique, París, Francia, mientras que en el segundo álbum se los puede escuchar en el 17de enero del mismo año en Concertgebouw, Amsterdam, Países Bajos. Y como esto no tiene ni necesita mucha presentación, paso a despedirme hasta el miércoles de la semana próxima, y espero que no me extrañen porque les dejé bastante música y reflecciones como para que estén entretenidos en sus momentos de ocio. Artista: Soft Machine Álbum: Facelift (France & Holland) Año: 2022 Género: Escena Canterbury Duración: 1:55:59 Referencia: Discogs Nacionalidad: Inglaterra Acá podrán disfrutar a los Soft Machine en vivo y tocando en la cima de su mejor momento. Rutledge, Hopper, Wyatt y Dean parecen juntos una fuerza de la naturaleza a la que nada se

Bosón de Higgs - Los Cuentos Espaciales (2023)

Para terminar la semana presentamos un disco doble muy especial, desde Ecuador presentamos a una banda que ya tiene un nombre particular que los define: Boson de Higgs, que como ópera prima se manda con un concepto inspirado en el cosmos, la astronomía en un viaje interestelar de 15 temas que tienen además su versión audiovisual, en un esfuerzo enorme que propone la divulgación científica y cultural de un modo nuevo, donde se aúnan la lírica en castellano, el rock alternativo, la psicodelia, el space rock, el hard rock y el rock progresivo. Un álbum doble sumamente ambicioso, con muy buenas letras y musicalmente muy bien logrado y entretenido en todos sus temas (algo muy difícil de conseguir, más pensando si es su primera producción) y donde puede verse en todo su esplendor en su versión audiovisual que obviamente no está presentado aquí salvo en algunos videos, pero que pueden ver en la red. En definitiva, dos discos muy buenos y realmente asombrosos para que tengan para entretenerse

Video de Los Viernes - Nostalgia del Hogar "Feel Like Going Home" 2003

The Blues es una serie documental producida por Martin Scorsese en 2003, declarado "Año del Blues" en Estados Unidos, genero que influyo al jazz y al rock. Cada una de las siete películas que componen la serie ha sido dirigida por un cineasta entusiasta del género y en ellas se hace un repaso su origen y desarrollo a lo largo del siglo xx Hoy toca el turno de Nostalgia del Hogar " Feel Like Going Home 2003" Dirigida por el propio Scorsese, este primer film de la serie rinde homenaje al Delta blues, a los orígenes del género, recorriendo el Estado de Misisipi de la mano del músico Corey Harris, para continuar después viajando por el continente africano en busca de las raíces del Blues. Feel like going home habla de músicos que se criaron alrededor de los algodonales, sin dinero ni comida, allí surgieron unos músicos que aliviaban las vidas de la gente como John Lee Hooker, Willie King, Son House o Robert Johnson. Músicos que se adaptaban a los tiempos, como O

Skraeckoedlan - Vermillion Sky (2024)

Entre el stoner rock, el doom y el heavy progresivo, con muchos riffs estupendos para todos y por todos lados, mucha adrenalina y potencia para un disco que en su conjunto resulta sorprendente. El segundo disco de una banda sueca que en todo momento despliega su propio sonido, a 4 años desde su anterior álbum, "Earth". Saltarás planetas, verás colisionar cuerpos celestes, atravesarás galaxias y te verás arrastrado hacia la nada que lo abarca todo, conocerás el vacío y el fuego abrasador de los soles, y también encontrarás algunos arcoíris desplegándose bajo el cielo bermellón. He aquí un viaje interestelar por el universo de los sonidos, en una búsqueda tremenda y desgarradora, un disco muy bien logrado, que muestra una de las facetas de los sonidos de hoy, donde bandas deambulan por el under de todos lados del mundo en pos de su propio sonido y su propia identidad, y también (al igual que muchos de nosotros) su lugar en el mundo terrenal, tan real y doloroso. Los invito

Guranfoe - Gumbo Gumbo (2022)

Como corresponde al comienzo de semana, empezamos un lunes con un gran disco, y ahora de una de esas nuevas bandas que no tienen nada que envidiarle a los grandes monstruos de antaño. ahora con su segundo y último disco. En una entrega totalmente instrumental y a lo largo de todo el disco estos músicos ingleses nos brindan una exposición de como un disco puede ser melódico, apasionado, imaginativo, complejo, temerario, dinámico, adrenalítico y muchos adjetivos más que no alcanzan para describir toda la música de estos chicos, ahora arremetiendo con temas que fueron creados en sus inicios, incluso que fueron interpretados en vivo pero nunca grabados, y razones tienen ya que este material no da para que se pierda en el olvido, ya que este álbum suena tan hermoso como se ve su portada. Cinco temas que son técnicamente brillantes y que recuerdan a una colisión entre Zappa y Camel. Una fusión de folk, jazz y Canterbury que es tan psicodélica como progresiva, intensamente melódica y fá

Cuando la Quieren Enterrar, la Memoria se Planta

El pueblo armado con pañuelos blancos aplastó el intento de impunidad . Alrededor de medio millón de personas se manifestaron en la Plaza de Mayo para rechazar categóricamente el 2x1 de la Corte a los genocidas. No fue la única, hubo al menos veinte plazas más en todo el país, todas repletas, además de manifestaciones en el exterior. Una multitud con pañuelos blancos en la cabeza pudo más que todo el mecanismo político-judicial-eclesiastico-mediático, forzando al Congreso a votar una ley para excluir la aplicación del "2x1" en las causas de lesa humanidad. Tocaron una fibra muy profunda en la historia Argentina, que traspasa generaciones. No queremos genocidas en la calle: es tan simple como eso. Tenemos que tolerar las prisiones domiciliarias a genocidas, que se mueran sin ser condenados o que sean excarcelados gracias a los jueces blancos. Cuesta muchísimo armar las causas, años. Muchos están prófugos, muchos no pudieron condenarse por falta de pruebas y otros porque tard

Rick Miller - One of the Many (2024)

Para empezar el día y la semana nos vamos a Canadá de la mano del veterano multi-instrumentalista Rick Miller que presenta su último y mejor trabajo. Desplegando un rock progresivo atmosférico muy emocional, con muchas texturas sonoras y lleno de buen gusto, inspirado en artistas como Pink Floyd, The Pineapple Thief y Steve Hackett (ojo, solo inspirado), siempre con temáticas líricas ambiciosas, sombrías y bellas como su música y la tapa de sus discos. Este es un viaje a través de paisajes sonoros ricos, cinematográficos, etéreos melancólicos, nostálgicos y oscuros, con mucha sensibilidad melódica, ofreciendo capas, sofisticados arreglos que brindan una experiencia inmersiva que nunca deja de sorprender e impresionar, pero al mismo tiempo accesible y atractivo. Te invito a un mundo sonoro intrigante, con cautivadoras melodías de música atractiva, estimulante y gratificante, ideal para comenzar la semana en el blog cabeza. Artista: Rick Miller Álbum: One of the Many Año: 2002

Los Dos - Caminos (1974)

En nuestra recorrida por el rock mexicano hoy revisamos un disco humilde pero bien logrado, sin esperar demasiado tampoco, y copio un comentario que hace referencia justamente a ello: "Es refrescante escuchar a músicos que se limitaban a hacer lo que les venía en gana, sin preocuparse de ser considerados autores geniales y con ideas nuevas. Los Dos eran Allan y Salvador, un dúo muy limitado musicalmente; no obstante, esas carencias la suplen con honestidad: mucha honestidad. Su mezcla, algo burda, de rock-folk, música tradicional latina y canto nuevo chileno, tiene momentos por demás emotivos y conmovedores. Sus letras eran muy sencillas y poco rebuscadas, en su mayoría acerca del amor". Disco raro, muy poca información se encuentra en la red, a mi parecer uno de los pocos discos hechos en México en los 70’s con un sonido muy jipi y folk. Eso lo describe bien, bien jipi y folk... Artista: Los Dos Álbum: Caminos Año: 1974 Género: Rock psicodélico / Folk rock Dura

Ideario del arte y política cabezona

Ideario del arte y política cabezona


"La desobediencia civil es el derecho imprescriptible de todo ciudadano. No puede renunciar a ella sin dejar de ser un hombre".

Gandhi, Tous les hommes sont frères, Gallimard, 1969, p. 235.